martes, 3 de septiembre de 2013

CAPÍTULO II DEL GALAN DEL VESUBIO





Bruno regresa a la oficina y Antonella queda desconsolada por no saber de Piero, no sabía qué hacer y  optó por esperar su llamada, no se despegó del teléfono , ni de la ventana  en   toda la tarde, sus lágrimas corrían por su rostro.  Ella pierde la mirada hasta el final de la calle,  por si reconocía la  silueta de  su   Amado, su corazón le decía que estaba con otra, sabía de sus líos de faldas, pero su mente le decía debe estar triste igual que ella, seguro vendrá y me llamará.

Sonó el teléfono, su corazón empezó a latir como potro salvaje,  corrió a la sala con emoción, como una adolescente pone una dulce voz:

 - ¡Hola!, …. Y del otro lado  del teléfono  con voz ronca…  

– ¿Como está mi bambina?... ¡ puffff rayos !,.  Antonella, sintió que el corazón cayó al suelo y la desazón fue enorme,  dice:
 – ¡Dime Mamá, qué quieres!,  la voz se había convertido en terminator , para qué me llamas ahora no puedo hablar contigo estoy muy ocupada,  Antonella quería dejar el teléfono libre por si Piero llama.
 - No quiero nada, solo quería saber de ti , ¿qué te pasa?.
 -  No me pasa nada Mamma, solo que ahora estoy muy liada, mi Bru, me pidió que le  ordenara unos papeles de su despacho no quiero que llegue y no esté listo, solo eso.
- No te creo, conozco esa voz,  a ti te pasa algo y me vas a decir  qué es  ahora mismo.
-¡Mamma déjame en paz! , siempre viendo fantasmas donde no los hay , no me pasa  nada, así  que hablamos luego ¿te parece?.
- Bueno mi bambina ya me lo contaras, chao y que Dios te cuide
- No hay nada que contar, ya te dije,  quédate tranquila, así que chao Mamma. 

Así terminó su tarde llena de tristeza, en la ventana, sin ni si quiera imaginar que su Piero disfrutaba gozosamente de su vecina, olvidándose de su dulce Antonella.

Llegó el fin de semana y como todos los sábados, Pina observa desde el portal, sabe que Piero está a punto de llegar para su cita con Georgina del 4to B, ella espera, que  Piero le regale una flor.  Pina en su interior suspira por él y sueña,  que algún día le regalará un beso apasionado, de esos que siempre observa a escondidas y sin darse cuenta se empieza a estremecer todo su cuerpo imaginando a su Bambino entre sus brazos.

Georgina, de 35 años soltera, alta, delgada, de ojos avellanados, cabellos largos, con un lunar pequeño al borde de los labios gruesos y unos senos duros y redondos que enloquecen cualquier hijo de vecino.

No tiene muy buena fama dicen, los que la conocen, que le gusta más  una cama que  un bizcocho, sin embargo su Piero, el Galan del Vesubio, es su  preferido ,  en el fondo está locamente enamorada de  sus versos que  la hace estremecer hasta dejarla extasiada.

Efectivamente, llegó Piero con dos flores en la mano  una blanca para su Pina y otra roja para su Georgina, Pina de inmediato se adelantó para abrir el garaje, para que Antonella no lo vea, ya Piero estaba en la puerta y con un beso en el cachete casi al borde de los labios, saluda a Pina y  le entrega la flor blanca.

- ¡Apresúrate! mi Bambino, no debes dejarte ver por Antonella
- Mi Pina no te preocupes, hoy es sábado estarán en la piscina del Club,
- No,  no han salido, así que corre que no te vean.
 y Piero con un guiño, se despide de  Pina.

Georgina ya está preparada,  le abre la puerta con un camisón de seda negro de escote pronunciado anunciando la divina velada. Ella abre la puerta sin mediar palabras le impregna un beso profundo dejando un susurro al oído -¡amore mio!, que bien hueles y tomándolo de la  mano lo lleva al alcoba.

Piero empieza con sus dedos a dibujar su cuerpo , muy tiernamente, mientras la besa por el cuello,  sus labios, va dibujando seducción para  empezar a jugar y seducirla,  ella se va rindiendo al olor de su piel , disfrutando de cada palabra, de cada beso...Sus cuerpos aprisionados y  sudorosos, que entre jadeo y jadeo susurran palabras excitantes de gozo, donde ambos besan sus corazones, regando sus jardines de rica savia,  logrando acelerar el ritmo de sus  pulsaciones, bañándose de placer el  uno al  otro.

Mientras se  tatúan dulcemente versos en la piel, con  una gloriosa melodía de fulgor y amor encendido. El ambiente exquisito los acompaña dando el toque mágico, mientras hacían el amor con todas sus fuerzas profundas que sus letras claman.

Al anochecer ya la luna brillaba y  Georgina y  Piero, culminan el festín dulce y bravío que se han dado en este sábado glorioso  y los dos entre miradas cómplices, gritaban un ¡te quiero!.    


Continuará…


( los que no han leído el primer capítulo, está en la etiqueta de Relatos  )




8 comentarios:

  1. Seguiremos atentos el desarrollo de este relato que "engancha"
    Un abrazo.

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  2. uuff Rafael me alegra un montón que te guste estoy incursionando en este género pero mi poesía no la dejo amigo, los colgaré cada dos dias así para inetercambiar mil gracias!!!!!!!!!!!!!!!!! un besazo jejeje desde mi brillo del mar con cariño Bea

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  3. ¡¡¡Jozú!!!¡¡¡Hay que ver con ese Piero!!! No da a vasto el hombre.
    Espero la continuación...¡¡¡Es mi ídolooo...ooo!!!
    Abrazos y besos.

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  4. Pedro!! jajajajajaa uuufffff sois todos iguales jajajajaa unos pillos encantadores jajajaja me has hech0 reir besos desde mi brillo del mar

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  5. He leído también el primer capítulo para no perderme nada. Muy bueno, buenísimo. Un abrazo y aplausos de la Sociedad Argentina de Escritores Filial Villa María- Córdoba.

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    1. SADE, muchísimas gracias amigo mil gracias pos tu linda visita, me alegro que te guste, un abrazo desde mi brillo del mar

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  6. Hasta ahora Piero maneja la situación, seguirá así?...

    Besos dulces.

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  7. Dulce!! de momento de momento ajajajja mil gracia sol , por venir a dejar huella, besos desde mi brillo del mar

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