LLUVIA, TESTIGO DEL DESEO
Nuestra ventana lluviosa,
nublada nuestra alcoba.
Nos invita abrazar,
entre piernas enredar…
Las sábanas tibias
de una mañana fría,
dando calor a nuestro placer,
suspiramos hasta enloquecer.
El viento nos golpea, nos exista.
Las lujurias gritan, se desnudan susurrando suaves melodías.
Se acerca oído, baja por el cuello, nos
estremecemos
Y un beso húmedo nos regala una caricia.
Sigue lloviendo mientras nos queremos,
miradas ardientes brotan deseos…
La lluvia sigue su curso,
su batuta es el viento.
Sensualidad lluviosa,
puro sentimiento.
El éxtasis en nuestros cuerpos
bandera y tesoro humedeciendo.
®Beatriz Martín
28/11/14