Aún sin existir, te escribo versos de amor,
para que tu llegada
sea de entrañable pasión…
De las cárcolas del mar, se oye tu canto,
un susurro desesperado por un beso en mis labios,
su sonido me trastorna entre sueños y te amo.
Deja que la brisa marina te encuentre,
ella juega con mis deseos
del alma,
te seducirá a la orilla de una noche plaetada.
Deseo estrenar primavera con tu nombre,
beber aromas del color del placer
sentir mariposas sobre mi vientre nacer.
Aún sin existir mi pecho palpita por ti…
©Beatriz Martín
26/06/18